PORT BARTON
Las mejores PUESTAS DE SOL de FILIPINAS
En Port Barton pasamos nuestros últimos 5 días, del total de 28 que duró el intenso y emocionante viaje a Filipinas. Lo dejamos para el final porque queríamos descansar, y lo conseguimos. Os contamos todo sobre nuestra experiencia vivida en Port Barton, un lugar donde el estrés no existe.
CÓMO LLEGAMOS A PORT BARTON
Un día antes de irnos de El Nido, preguntamos en la estación de buses cómo llegar hasta Port Barton y nos recomendaron coger un autobús hasta Roxas que salía a las 08:00 horas. «No os recomendamos hacer lo que nosotros hicimos»
El precio era de 150 pesos por persona, mucho más bartato que los 700 pesos que nos pedían por persona en el hotel o en cualquier sitio de El Nido por llevarnos en vans privada desde El Nido hasta Port Barton. Al ver el precio y que iríamos en un bus local, aceptamos.

Pueblo de Roxas
Nada más llegar a Roxas teníamos que coger un Jeepney por 35 pesos que nos dejaría en Port Barton. Pero todo salió mal. Supuestamente el bus El Nido – Roxas tardaba 3 horas, lo que dejaba espacio suficiente para enlazar con el Jeepney. Eran las 12:30 horas cuando llegamos a Roxas y nuestro Jeepney si fue puntual en la hora de salida. Por lo que nos quedamos tirados y botín de los propietarios de los vans que nos veían como presas indefensas, pidiéndonos hasta 3000 pesos para llevarnos a Port Barton.
Ante tal situación, decidimos almorzar para calmarnos un poco. Al finalizar nos dirigimos a la carretera en dirección a Port Barton, donde llegaron las ofertas de los tricicles. Nadie bajaba de los 1000 pesos, hasta que el carácter de Diana salió a relucir, consiguiendo que nos llevaran por 500 pesos a los dos.
Carretera Roxas – Port Barton
La carretera era un infierno. En obras, llenas de baches, a las 3 de la tarde y todo ello en tricicle, hizo muy pesado nuestro trayecto hasta Port Barton. Haciendo cuentas, el total que pagamos por todo el trayecto fue de 900 pesos si sumamos bus y tricicle, con los 100 que le dimos de propina al simpático conductor del tricicle por la más de 1 hora y media que duró el viaje.
La otra opción era 1400 pesos los dos en Vans privada y en 3 horas hubieramos estado en Port Barton. Eso sí, en el viaje en bus éramos los únicos extranjeros, lo que se convirtió en toda una aventura rodeado de lugareños, gallinas y sacos de todas las dimensiones, que nos encantó.

ALOJAMIENTOS EN PORT BARTON
Port Barton, además de una exótica y casi exclusiva playa para los turistas, tiene otra virtud muy solicitada hoy en día: la situación del hotel en primera línea de playa. Hay gran cantidad de hoteles a escasos metros de la orilla, con una calidad relación precio bastante buena.
Nosotros elegimos Ausan Beach Front Cottages, un bonito hotel con habitaciones sencillas, algunas de ellas situada en los árboles. La comida era muy buena y por la noche tenéis la opción de cenar en plena orilla rodeado de antorchas.
QUÉ HACER Y QUÉ VISITAR EN PORT BARTON
Tanto si lo dejáis para el final, como si queréis meterlo en medio del viaje, Port Barton lo único que te ofrece es descanso y relax. No busquéis actividades, cataratas, volcanes, snorkel, tiburones o animales exóticos. No prentendáis alquilar una moto o contratar una actividad. Solo es para ir a descansar y disfrutar de las mejores puestas de sol de toda Filipinas.
A pie de playa ofrecen hacer tours similares a los del El Nido para visitar islas cercanas, pero para nosotros el snorkel en Filipinas ya era historia. Lo teníamos muy claro. Los últimos 5 días del viaje sería para descansar antes de regresar a España. Y así lo hicimos.
Lluvias en Filipinas
También nos dimos cuenta y pudimos comprobar cómo sería viajar a Filipinas en tiempo de lluvias, ya que de los 5 días que estuvimos, 3 fueron lluviosos y sin posibilidad de hacer prácticamente nada, o para nosotros, todo lo que pretendíamos, que era estar tumbados en la playa, leer, escribir para el blog, compartir momentos, disfrutar de la rica comida filipina y relajarnos.

¿Dónde comer?
Muy recomendable es comer en Gacayan, un pequeño restaurante en medio del pueblo muy frecuentado por turistas y mochileros, donde se comen las mejores pizzas hechas in-situ de toda Filipinas. Pedir las seafood y las de sardinas. También tienen buen pescado y el trato es excelente.

PLAYAS DE PORT BARTON
Port Barton es un pueblo muy humilde que intenta avanzar gracias al turismo. Su playa es bastante exótica, cercada por palmeras que parecen querer tocar el agua. Es pequeña, con unos 3 escasos kms de costa. Cuando estuvimos habían pocos turistas, lo que hacía aún más placentera la estancia.
Calles
Pasear por sus calles de tierra te relaja. Nadie te intenta vender nada, no te altera pensar qué souvenir comprar, no tiene lujos. Dos largas calles cruzan el pueblo, de las que manan otras más pequeñas.
🌴 White Beach
La única actividad que os podemos recomendar es ir a visitar White Beach, playa solitaria a unos 5 kms desde Port Barton a la que se puede ir andando por la orilla, adentrándote luego por el bosque. Nos es difícil llegar y los agradables ciudadanos de Port Barton os guiarán sin problemas. Nosotros quisimos ir, pero cuando partimos unas negras nubes con sus correspondientes truenos y relámpagos, nos hizo desistir.
Vuelta a Manila
La vuelta a Manila fue rutinaria, cansada y pesada, ya que nuestro vuelo con AirAsia se retrasó unas 6 horas. Un día para comprar los últimos regalos y dar un vuelta por Malate, antes de ir hasta el Aeropuerto y regresar a nuestro querida España.
Fin de nuestra aventura en Filipinas, país al que recomendamos ir por un periodo mínimo de 15 días y en el que podréis gozar con sus playas, su comida, sus gentes y su espectacular mundo marino para los amantes del snorkel y buceo.